ROMA,
El Observador Permanente de la Santa Sede ante la ONU, Mons. Silvano Maria Tomasi, advirtió las consecuencias que podría tener una intervención armada internacional en Siria, ante el presunto uso de armas químicas por parte del gobierno contra la población civil.
En declaraciones a Radio Vaticana, Mons. Tomasi recordó que la experiencia de intervenciones similares en Oriente Medio, como en Irak, o Afganistán, "ha demostrado que el camino de la intervención armada no ha traído ningún resultado constructivo. Y prevalece como válido el principio: con la guerra se pierde todo".
La crisis en Siria sigue agravándose en estos días y amenaza con alargarse todavía más. Las imágenes que llegan desde el país apuntan a la evidencia del uso de armas químicas que habría causado la muerte a decenas y decenas de civiles, entre los que existen mujeres y niños.
Muchos medios de comunicación escriben hoy sobre la noticia y apuntan a la posibilidad de una intervención armada en caso de ser confirmado el ataque químico, a pesar de que el gobierno desde Damasco negó ataque alguno.
"Es necesario aclarar el hecho, también porque desde un punto de vista de interés inmediato, al gobierno de Damasco no le sirve este tipo de tragedia, sabiendo que sería culpado directamente. Como en el caso de las investigaciones de un homicidio, hace falta hacerse una pregunta. ¿A quién interesa realmente este tipo de crimen deshumano?", cuestionó Mons. Tomasi.
"No es necesario acelerar un juicio sin tener evidencia suficiente. La comunidad internacional, a través de los observadores de las Naciones Unidas, ya presentes en Siria, podrían arrojar luz sobre esta nueva tragedia. No se puede a mi parecer, partir ya con un juicio, señalando que éste o aquél es el responsable", añadió.