VATICANO,
La vida humana debe ser defendida "siempre", desde el vientre materno, reconociendo en ella un don de Dios y una "garantía del futuro de la humanidad", afirmó el Papa Francisco en un mensaje para la Semana Nacional de la Familia, que comenzó ayer en el Brasil.
Según señala Radio Vaticano, el Papa inicia su mensaje afirmando que todavía conserva "vivas en el corazón las alegrías recibidas" durante el viaje al Brasil por la Jornada Mundial de la Juventud celebrada hace unos dias en Río de Janeiro.
El Papa animó a los padres en la "misión noble y exigente de ser los primeros colaboradores de Dios en la orientación fundamental de la existencia y en la garantía de un buen futuro. Por ello es importante que los padres cultiven prácticas comunes de fe en la familia, que acompañen la maduración de la fe de los hijos".
Los padres, prosiguió el Papa, fueron llamados a "transmitir con las palabras y sobre todo con sus obras las verdades fundamentales sobre la vida y el amor humano, que reciben una nueva luz de la Revelación de Dios".
"En particular, frente a la cultura del deshecho, que relativiza el valor de la vida humana -subrayó el Santo Padre- los padres están llamados a transmitir a sus hijos la conciencia de que siempre debe ser defendida, desde el vientre materno, reconociendo en ella un don de Dios y una garantía del futuro de la humanidad, pero también en el cuidado de los ancianos, especialmente de los abuelos, que son la memoria viva de un pueblo y transmiten la sabiduría de la vida".
Para concluir, invocando la intercesión de Nuestra Señora de Aparecida, el Papa pidió que las familias puedan llegar a ser "los testimonios más convincentes de la belleza del amor sostenido por la fe".