VATICANO,
El Papa Francisco visitó hoy viernes por sorpresa la zona industrial de la Ciudad del Vaticano, donde saludó a los carpinteros y a los obreros de la central térmica.
Los periodistas del diario L'Osservatore Romano, cuya redacción queda en la misma zona, observaron el momento y se asomaron a las ventanas para aplaudir al Pontífice que los saludó a la distancia.
"Francisco llegó de improviso, sin que nadie nos hubiera advertido. Nos lo encontramos delante, imagínese nuestro estupor", afirmó uno de los carpinteros, en declaraciones a la agencia de noticias italiana AGI.
"El Papa quiso recorrer todas las divisiones productivas, lugares en los que nunca habríamos pensado recibir al pontífice", dijo.
La central térmica vaticana fue construida en los años 1932 y 1933 bajo el pontificado de Pío XI para aprovechar la producción de energía eléctrica que se proyectó en el pequeño Estado en 1897 gracias a la caída del agua del acueducto procedente del lago de Bracciano.
En 1934 fueron construidos cerca de la central los talleres de mecánica, el laboratorio de técnica electrónica y la carpintería.