REDACCION CENTRAL,
El Arzobispo de Rosario (Argentina), Mons. José Luis Mollaghan, hizo un llamado a esperanza y a la solidaridad con los afectados por la explosión ocurrida esta mañana en esa ciudad que ha cobrado la vida de, hasta el momento, 9 personas y que ha dejado más de 60 heridos y varios desaparecidos.
Alrededor de las 9:35 a.m. (hora local), estalló una caldera en un edificio en la calle Salta 2145 en Rosario, ocasionando un incendio de grandes proporciones y derrumbes en los edificios aledaños. Se estima que la onda expansiva alcanzó 40 cuadras a la redonda. Como medida de precaución las autoridades han suspendido los servicios de gas y luz en la zona.
En declaraciones a ACI Prensa, el Arzobispo de Rosario dijo que "es un momento muy duro que ha dejado muchos heridos y difuntos. Nos sorprendió este momento tan difícil que ha padecido la ciudad con una verdadera tragedia".
En estos momento "de tanta aflicción, lo que hacemos es acompañar a tanta gente", aseguró.
Monseñor Mollaghan, conmovido por esta tragedia, también se dio tiempo para agradecer a las distintas instituciones locales y nacionales que se han volcado para dar su ayuda y "al mismo tiempo mucha gente que acude brindando su apoyo como médicos, paramédicos, psicólogos y personas que pueden hacer tanto para mitigar este dolor".
También se han acercado al lugar de los hechos un grupo de presbíteros del servicio sacerdotal y de pastoral de la salud que están atendiendo a las víctimas. El Arzobispo junto a los sacerdotes recorre las calles para aisitir en el dolor de la gente.