VATICANO,
Debemos orar con coraje al Señor, también con insistencia como hizo Abraham. Lo dijo esta mañana el Papa Francisco en su homilía de la Misa cotidiana en la Casa Santa Marta. El Santo Padre explicó que orar es también "negociar con el Señor", volverse hasta inoportunos como nos enseña Jesús.
Abraham habla al Señor con coraje e insistencia para defender a Sodoma de la destrucción. El Papa Francisco desarrolló su homilía partiendo de la primera lectura de hoy observando que "Abraham es un valiente y ora con valor". Abraham, dijo el Santo Padre, "siente la fuerza de hablar cara a cara con el Señor y trata de defender aquella ciudad". Y lo hace con insistencia. En la Biblia se recuerda que "la oración debe ser valiente":
"Cuando hablamos de coraje siempre pensamos en el coraje apostólico, ir a predicar el Evangelio, estas cosas… Pero existe también el valor ante al Señor. Aquella parresía ante el Señor: ir al Señor con valor para pedirle cosas. Esto hace un poco sonreír, está bien pero hace reír porque Abraham habla con el Señor en una manera especial, con este coraje y uno no sabe: si estamos ante un hombre que reza o ante un 'comerciante fenicio', porque regatea el precio, va, va… E insiste: de cincuenta logra bajar el precio a diez. Él sabía que no era posible. Sólo había un justo: su nieto, su sobrino… Pero con aquel coraje, con aquella insistencia, ¡iba adelante!".
A veces, puntualizó el Papa, se recurre al Señor para "pedir algo por una persona", se pide esto y aquello y después uno se olvida. "Pero eso –advirtió– no es oración", porque "si quieres que el Señor conceda una gracia, debes ir con valor y hacer aquello que hizo Abraham con su insistencia".
El Papa Francisco recordó que es el mismo Jesús quien nos dice que debemos orar como la viuda con el juez, como aquel que va de noche a tocar la puerta del amigo, con insistencia: "Jesús nos lo enseña así ". Y de hecho, observó, Jesús elogia a la mujer sirio-fenicia que pide insistentemente la curación de su hija. Insistencia, afirmó el Pontífice, también si esta nos agota, y "es verdaderamente agotador". Pero esto, dijo, "es una actitud de la oración".
Santa Teresa, recordó, "habla de la oración como un negociar con el Señor" y esto "es posible sólo cuando hay familiaridad con el Señor". "Es agotador, es verdad pero ésta es la oración, esto es recibir una gracia de Dios". El Papa subrayó el argumento que Abraham utiliza en su oración: "Toma los argumentos, las motivaciones del mismo corazón de Jesús":