LIMA,
El gobierno peruano, a través del Ministerio de Justicia, se comprometió ante el Congreso de la República a desarrollar el Plan Nacional de Derechos Humanos en el plazo de un mes, dejando de lado lineamientos que promovían la ideología gay y el aborto.
El pasado 3 de mayo, la entonces ministra de Justicia y hoy ministra de Relaciones Exteriores, Eda Rivas, se comprometió ante los congresistas peruanos a desarrollar en 30 días el Plan Nacional de Derechos Humanos, omitiendo los lineamientos promovidos por grupos de presión homosexual.
La mañana de hoy, 17 de mayo, se presentaron ante el Ministerio de Justicia y ?la Presidencia del Consejo de Ministros y el Congreso, 1600 firmas, recogidas por el Population Research Institute y el Instituto de Estudios Familia y Sociedad, exigiendo el cumplimiento del compromiso gubernamental de retirar del Plan Nacional de Derechos Humanos aquellas medidas que buscaban desfigurar la familia y la concepción de hombre y mujer.
Según denunciaron representantes de la sociedad civil, de partidos políticos, e incluso del Episcopado peruano, borradores del documento abrían las puertas al mal llamado "matrimonio" homosexual en el país, el reconocimiento de la homosexualidad como un "derecho", y buscaban la despenalización del aborto terapéutico y por violación en niñas y adolescentes.
El Plan Nacional de Derechos Humanos además buscaba la distribución gratuita de la píldora del día siguiente ("anticoncepción oral de emergencia"), a pesar de que el Tribunal Constitucional, en 2009, ordenó al Ministerio de Salud que "se abstenga de desarrollar como política pública la distribución gratuita a nivel nacional de la denominada 'Píldora del Día Siguiente'".
El investigador asociado del Population Research Institute, Sergio Burga, señaló que esta organización defensora de la vida y la familia participó "de varias audiencias descentralizadas que organizó el Ministerio de Justicia para la elaboración del Plan y en ninguna de ellas recogió propuestas como la que vimos en el borrador del Plan".