VATICANO,
Con esa naturalidad y sencillez que lo caracteriza, el Papa Francisco recogió el bolso de una anciana en silla de ruedas y se lo entregó gentilmente.
Este gesto que podría pasar desapercibido en otras circunstancias, se dió durante los saludos y las bendiciones que el Santo Padre impartía a su paso por un grupo de niños y personas mayores reunidos en la Plaza de San Pedro el domingo 5 de mayo.
La agencia vaticana News.va, describió el gesto como un acto "amoroso y espontáneo del Papa" el cual fue destacado por los diversos medios periodísticos del país.
La Señora al mirar al Papa aproximándose le dice "Viva el Papa", cuando Francisco está enfrente de ella, la mujer mirándole a los ojos le dice "¡Qué bello Papa!" y al tomar la mano del Pontífice para besarle su anillo el bolso que estaba su regazo se cae., es en ese mismo momento que el Papa sin dudarlo se agachó a recogerlo.
Antes de pasar a saludar a la siguiente persona que lo esperaba, el Santo Padre se asegura de que nada haya quedado en el suelo y ayuda a la anciana a "asegurar" el bolso en su regazo.
Las Mejores Noticias Católicas - directo a su bandeja de entrada
Regístrese para recibir nuestro boletín gratuito de ACI Prensa.