BERLÍN,
En una polémica declaración publicada en su sitio web, los obispos de la Conferencia Episcopal de Alemania autorizaron el uso de la "píldora del día siguiente" en los hospitales católicos para las mujeres víctimas de violación sexual alegando que existen "nuevos preparados" que no tendrían efecto abortivo.
La breve declaración titulada "Cuestiones teológico-morales en casos de violación (la píldora del día después)", cuya versión oficial en español puede leerse aquí, fue publicada al finalizar la asamblea plenaria que esta semana reunió a los obispos del país en la localidad de Trier.
El texto sostiene que "el Cardenal Karl Lehmann (Maguncia), en su calidad de presidente de la Comisión Doctrinal de la Conferencia Episcopal Alemana, ha presentado sobre la base de los últimos avances de la ciencia, una vez constatada la disponibilidad de nuevos preparados con principios activos alterados, la evaluación teológico-moral del empleo de la llamada 'píldora del día después'". Sin embargo, el texto no identifica estos "nuevos preparados".
"La asamblea plenaria ha reiterado que las mujeres que hayan sufrido una violación reciben, por supuesto, asistencia humana, médica, psicológica y espiritual en los hospitales católicos. Esto puede incluir la administración de la 'píldora del día después' partiendo de la base de que sus principios sean no abortivos, sino anticonceptivos. Seguirá sin poderse aplicar métodos médicos o farmacéuticos que conlleven la muerte del embrión", agrega.
Los obispos informaron que durante la asamblea plenaria "el Cardenal Joachim Meisner (Colonia) explicó su declaración del pasado 31 de enero de 2013 – de acuerdo con la Congregación para la Doctrina de la Fe y la Academia Pontificia para la Vida – así como el trasfondo de la cuestión, que tiene como punto de partida el rechazo de asistencia a una víctima de violación por parte de dos hospitales de Colonia".
En efecto, a fines de enero la prensa dio cobertura a lo ocurrido con una mujer víctima de violación que no recibió asistencia oportuna en dos hospitales católicos. Sobre este tema, el 31 de enero, el Cardenal Meisner dijo a la prensa que "si un fármaco que evita la concepción es usado luego de una violación con el propósito de evitar la fertilización, entonces eso en mi opinión es justificable".