Tras el anuncio de la renuncia del Papa Benedicto XVI, numerosos Obispos estadounidenses expresaron su gratitud por sus más de ocho años de servicio como Obispo de Roma y Pastor de la Iglesia universal.
El Arzobispo de Nueva York y Presidente de la Conferencia de Obispos Católicos de Estados Unidos, Cardenal Timothy Dolan, señaló que "el Santo Padre trajo a su pontificado el tierno corazón de un pastor, la mente incisiva de un erudito y la confianza de un alma unida a su Dios en todo lo que hizo".
El Purpurado indicó que la renuncia es otra muestra de su gran cuidado para la Iglesia, "estamos tristes pero agradecidos por sus ocho años de liderazgo desinteresado como sucesor de San Pedro".
"El Papa Benedicto XVI nos ha enseñado las verdades eternas, como el valor de la vida humana y la fuerza de lo que une a los católicos en la Iglesia".
Por su parte, el Arzobispo de Chicago, Cardenal Francis George, dijo que el Papa "en toda circunstancia, ha puesto la voluntad de Dios para el bien de la Iglesia antes de cualquier otra consideración"
"El Papa –señaló el Prelado– ha enseñado con claridad y caridad lo que Dios ha revelado al mundo en Cristo, ha transmitido la fe apostólica, que ha amado todo el pueblo de Dios con todo su corazón".