BUENOS AIRES,
Una joven de 15 años se encuentra en grave estado de salud luego de que en el Hospital Federico Abete, del partido de Malvinas Argentinas, le practicaran un aborto con fármacos con los que se tratan úlceras y otras complicaciones estomacales. Dicho aborto provocado se convirtió en un aborto séptico.
La niña, que ingresó el 26 de enero acompañada de una amiga de 20 años, perdió a su bebé de cuatro meses de gestación tras someterse a una intervención según marca la guía de procedimientos para abortos no punibles que el Ministerio de Salud bonaerense instrumentó en julio del año pasado. Las drogas suministradas a la joven lograron matar al niño en gestación, pero no provocaron su expulsión, por lo que debió efectuársele una cesárea de urgencia.
La intervención produjo una infección generalizada. Según la epicrisis firmada por el doctor Vladimir Funes, de la guardia del centro asistencial, la paciente tuvo un "shock" séptico posoperatorio e ingresó a la Terapia Intensiva con una infección grave. Las operaciones esterilizantes practicadas podrían haber afectado el útero y las trompas, por lo que la joven habría quedado infértil de por vida.
El doctor Roberto Castellanos, presidente de la ONG Pro-Vida y denunciante de lo sucedido, informó a la agencia AICA que en este aborto "utilizaron Oxaprost u otras drogas con las que se tratan úlceras, y pudieron matar al bebé, pero no expulsarlo. Se le ha generado una infección generalizada, y encima la madre de la chica está desesperada porque no sabía nada".
Castellanos tuvo noticia de lo sucedido a través de un médico de planta que prefirió resguardar su identidad. "Esto tira por tierra la teoría de los abortos no punibles seguros en los hospitales públicos. Quizás esta chica cayó víctima de la propaganda y pensó que no era nada grave", adujo el abogado, que en estos momentos busca acercarse a la familia para brindarles asistencia legal y psicológica. Castellanos sostiene además que el hospital está buscando trasladarla a un centro de mayor complejidad y desligarse del problema que allí se generó.
La guardia del Hospital Abete confirmó la situación de la joven pero no quisieron dar más datos: "lo único que te podemos decir es que está internada", dijo una empleada de Urgencias.