VATICANO,
"Ministrorum institutio" es el título del Motu Proprio con que el Papa Benedicto XVI modificó la constitución apostólica "Pastor Bonus" para trasladar la competencia sobre los seminarios de la Congregación para la Educación Católica a la Congregación para el Clero.
En el documento dado a conocer hoy, el Santo Padre señala que "la formación de los ministros sagrados fue una de las preocupaciones principales de los Padres del Concilio Ecuménico Vaticano II, que escribieron ‘Conociendo muy bien el Santo Concilio que la anhelada renovación de toda la Iglesia depende en gran parte del ministerio de los sacerdotes, animado por el espíritu de Cristo, proclama la grandísima importancia de la formación sacerdotal’".
"En este contexto, el canon 232 del CIC reivindica para la Iglesia el ‘derecho propio y exclusivo’ de ocuparse de la formación de aquellos que están destinados a los ministerios sagrados, la cual suele tener lugar en los seminarios".
El texto recuerda además que el Concilio Vaticano II afirma que "los seminarios mayores son necesarios para la formación sacerdotal".
"Los seminarios pertenecen, de acuerdo con el Concilio Vaticano II y el Código de Derecho Canónico de 1983, al ámbito de la ‘formación de los clérigos’, que para ser verdadera y eficaz debe unir la formación permanente con la formación en el seminario".
Benedicto XVI recuerda luego lo escrito por el Beato Juan Pablo II en la exhortación apostólica Pastores Dabo Vobis de 1992: "es de mucha importancia darse cuenta y respetar la intrínseca relación que hay entre la formación que precede a la Ordenación y la que le sigue. En efecto, si hubiese una discontinuidad o incluso una deformación entre estas dos fases formativas, se seguirían inmediatamente consecuencias graves para la actividad pastoral y para la comunión fraterna entre los presbíteros, particularmente entre los de diferente edad".