MADRID,
El Secretario General de la Conferencia Episcopal Española (CEE), Mons. Juan Antonio Martínez Camino, señaló que “la mal llamada ley del matrimonio homosexual es una ley de restricción de derechos porque ha eliminado el derecho de los españoles a ser reconocidos como esposo y esposa, y como padre y madre”.
Así lo indicó el también Obispo Auxiliar de Madrid en entrevista concedida el 29 de noviembre a Isabel Durán en el programa “Sin Rodeos” de 13tv, en donde también señaló ayer que “todos deseamos que se dé un paso adelante para que sean reconocidos los derechos de todos”.
El portavoz de la CEE mostró su preocupación al apuntar que “no hace falta ser político para entender que si ciertos conceptos no están reconocidos en la ley generarán vacíos legales”. Por ello, pidió a los católicos que “actúen en conciencia, sin tener en cuenta la disciplina de voto”.
Mons. Martínez Camino dijo además que existe “un alejamiento entre la clase política y la sociedad”, y ha afirmado que “la sociedad necesita personas que la conduzcan a un bien común”.
Continuando con el análisis de la situación política del país, el Prelado destacó que “la unidad es una expresión de la solidaridad” e insistió en que “cuando las cosas van mal es cuando hay que estar más unidos. En estos momentos, no se puede vulnerar el orden legal y la Constitución”.
“Una decisión unilateral que ponga en cuestión el orden legal no es admisible”, agregó.
El Obispo resaltó también que “sin la familia no se puede salir de la crisis. Si no hay niños y jóvenes con qué se va a atender a las clases pasivas. Si no se forma a un ciudadano honrado en la familia, no existirá una sociedad sana”.
En relación a los jóvenes, el Prelado lamentó que “en las macrofiestas, las relaciones humanas no son las mejores”, por eso, ha pedido a los padres que inculquen a sus hijos la posibilidad de otras formas de diversión que tengan como objetivo “estrechar la amistad, no perder la conciencia”.
Mons. Martínez Camino se refirió al fallecimiento de la última víctima de la tragedia del Madrid Arena la noche del 31 de octubre, y al recordar las palabras de la madre de Belén Langdon ha afirmado que es bueno que “los creyentes expresen sus sentimientos con mayor libertad”.
El Obispo recordó luego que la Iglesia Católica no recibe ni un euro del Estado, sino que se trata de una asignación dependiente de la contribución de los ciudadanos, y que puede ser mayor o menor en función de las aportaciones de estos.
Mons. Martínez Camino ha agradecido la generosidad de los españoles y ha destacado que, desde 2006, un millón más de contribuyentes han marcado la casilla de la Iglesia Católica en su declaración de la Renta.
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