ROMA,
El Cardenal Tarcisio Bertone, Secretario de Estado del Vaticano, habló esta mañana durante los trabajos de la Asamblea sinodal acerca del envío de una delegación de padres sinodales a Damasco, Siria, y explicó que éste se postergaría para después de concluido el Sínodo el domingo 28 de octubre.
"La iniciativa –dijo el Purpurado– tuvo un eco muy amplio, no solamente en Roma o en Siria, sino en el ámbito internacional y recibió una aceptación positiva". "Quiero comunicarles, ante todo, que se sigue estudiando la cuestión y preparando la visita, no obstante los trágicos sucesos ocurridos hace pocos días en la región", añadió.
El Cardenal recordó que "el martes pasado anuncié ante esta asamblea la decisión del Santo Padre de enviar una delegación a Damasco para expresar su solidaridad, la del Sínodo y la de toda la Iglesia a la población de Siria que desgraciadamente, desde hace tiempo vive una trágica situación de sufrimiento, y manifestar nuestra cercanía espiritual a los hermanos y hermanas cristianos de ese país, junto al aliento a cuantos están comprometidos en la búsqueda de una solución respetuosa de los derechos y los deberes de todos".
El Secretario de Estado afirmó que "como es sabido es muy vivo el deseo de expresar la cercanía de la Santa Sede y de la Iglesia universal, a través de una delegación que vaya a Damasco, en los tiempos y modalidades que serán anunciadas, después de ser definidas a la luz de los contactos y de los preparativos que se están efectuando".
"Considerada la gravedad de la situación, la visita será postergada, probablemente hasta después de la conclusión del Sínodo; y se modificará de alguna forma la composición de la delegación, debido también a los compromisos de sus miembros", explicó.
El Cardenal Bertone precisó además que "la contribución de los donativos personales de los Padres Sinodales, junto con los de la Santa Sede, será enviada a Siria después del Sínodo, como gesto de solidaridad fraternal a toda la población".