VATICANO,
Las reliquias del Beato Papa Juan Pablo II serán llevadas a Lourdes en ocasión de la peregrinación que organiza la Unión Nacional Italiana para el Transporte de Enfermos a Lourdes y a los Santuarios Internacionales (UNITALSI) del 21 al 27 de octubre.
De esta manera, la fiesta establecida para la celebración del Beato Wojtyla en la diócesis de Roma y otras diócesis más que solicitaron plegarse a la misma, el 22 de octubre, se verá acompañada por estas reliquias en Lourdes, donde está uno de los Santuarios Marianos más importantes del mundo en el que Santa Bernardette Subirous vio a la Madre de Dios en diversas apariciones en 1858.
El Arzobispo Zygmunt Zimowski, Presidente del Pontificio Consejo para la Pastoral de los Agentes Sanitarios, fue quien concedió a UNITALSI el permiso de llevar al santuario mariano el relicario con la ampolla de la sangre de Juan Pablo II para que pueda ser visto y venerado por los peregrinos de todo el mundo.
El presidente de Unitalsi, Salvatore Pagliucca, declaró a Radio Vaticano que en el Año de la fe y durante el Sínodo sobre la Nueva Evangelización "un tema que preocupaba mucho a Juan Pablo (...) que sigue influenciando a la Iglesia y a la gente (...) la presencia del relicario del Beato en esta peregrinación es una señal rica de significado".
"Representa la presencia de sus ideas, de sus sentimientos, la presencia, sobre todo, del amor que dio, como hombre y como pastor a toda la gente, a los fieles y en particular a los enfermos y discapacitados", añadió.
El Papa Benedicto XVI beatificó a Juan Pablo II el 1 de mayo de 2011 ante 1 millón de personas llegadas de distintas partes del mundo a la Plaza de San Pedro en el Vaticano. Ese día estableció que su fiesta se celebraría en Roma cada 22 de octubre.