VATICANO,
El Papa Benedicto XVI recordó que la Iglesia Católica apoya el modelo de las cooperativas agrícolas, ya que ellas no sólo aportan a la economía sino al crecimiento humano de cuantos están ligados a su acción.
Así lo indicó el Santo Padre en un mensaje enviado, con motivo del Día Mundial de la Alimentación que se celebra todos los años el 16 de octubre, fecha de fundación de la Organización de las Naciones Unidas para la Agricultura y la Alimentación (FAO), al director de ese organismo José Graziano de Silva.
El Papa afirma en su mensaje que "este año el Día Mundial de la Alimentación se celebra mientras los efectos de la crisis económica afectan cada vez más las necesidades básicas, como el derecho fundamental de toda persona a una alimentación sana y adecuada, empeorando especialmente la situación de los que viven en condiciones de pobreza y subdesarrollo".
"Se trata de un contexto similar al que inspiró la creación de la FAO, y que llama a las instituciones nacionales e internacionales al compromiso de liberar a la humanidad del hambre mediante el desarrollo agrícola y el crecimiento de las comunidades rurales".
En la desnutrición, de hecho, juegan un papel clave el desentendimiento gradual y la competitividad excesiva que amenazan con hacer olvidar que las soluciones comunes y compartidas pueden ofrecer respuestas adecuadas a las expectativas de los individuos y los pueblos".
De ahí la satisfacción que expresa el Pontífice por la decisión de dedicar este día a reflexionar sobre el tema "Las cooperativas agrícolas alimentan al mundo."