ROMA,
El fiscal Abdel Meguid Mahmoud ordenó este jueves liberar a dos niños coptos, de nueve y diez años, que habían sido acusados de orinar sobre un Corán y quemarlo, sin embargo, sus familias han sido amenazas de muerte, lo que ha incrementado la tensión entre musulmanes y cristianos.
El hecho ocurrió en la localidad de Azbat Marqos, provincia de Beni Suef, al sur de El Cairo. Los niños Nabil Nagui Rezq y Mina Nadi Farag podrían permanecer en un centro de detención de menores una semana mientras se desarrolla la investigación.
El padre aseguró que ambos son analfabetos y no podían saber que lo que tenían en sus manos eran hojas del Corán.
Por su parte, el Obispo Auxiliar de Alejandría de los coptos, Mons. Botros Fahim Awad Hanna, dijo a la agencia vaticana Fides que la detención de los niños manifiesta un "creciente odio hace los cristianos egipcios que se expresa de muchas maneras".
"Espero que las investigaciones se lleven a cabo correctamente, evitando tomar como pruebas los rumores que circulan y las murmuraciones", añadió.
El Prelado explicó que "a menudo, para ser acusado de algún delito contra el Islam basta sólo un comentario crítico sobre el comportamiento de los fundamentalistas escrito en los mensajes privados de la propia página de Facebook".