ROMA,
"Todos en el Líbano queríamos que el Papa se quedase más tiempo", afirmó Muhammad Sammak, asesor político del gran Muftí del Líbano y Secretario General del Comité Libanés para el diálogo islamo-cristiano, que destacó también el llamado de Benedicto XVI para lograr la paz en Siria.
"La visita de Benedicto XVI al Líbano ha demostrado al mundo que el pueblo libanés, cristianos y musulmanes, están unidos, mientras que los partidos políticos y las facciones se dividen y crean conflicto".
"La esperanza es que los políticos del Líbano también aprendan algo del espectáculo de unidad que se ha visto estos días de la visita papal", expresó en declaraciones recogidas por la agencia Fides.
Sobre la violencia en Siria, Sammak dijo que el Papa re-propuso "los principios de la dignidad humana y la protección de los derechos de los pueblos a decidir su propio futuro".
"Cualquier intento de instrumentalizar sus palabras está condenado al fracaso. Benedicto XVI es la cabeza de la Iglesia, no un líder político. Por eso no entra directamente en la agenda política. Y por eso sus palabras pueden ser apreciadas por todos".
Sammak, que asistió como invitado especial al Sínodo de los Obispos del 2010 sobre Oriente Medio, dijo a Fides que él es el autor del mensaje que el Gran Mufti Mohammed Rashid Gabbani entregó a Benedicto XVI durante el encuentro con los representantes de la comunidad islámica.