ROMA,
Entre las numerosas historias de superación que dejaron los Juegos Paralímpicos de Londres, la ganadora de la medalla de bronce en los 1.500 metros de invidentes totales, la italiana Annalisa Minetti, sorprendió a la prensa al afirmar que su verdadera medalla, es un rosario.
Al ser entrevistada por RaiSport al terminar la carrera, Annalisa, afirmó que realmente, la medalla que nunca la abandona, es un rosario que mostró victoriosa. "Hasta ahora mi medalla siempre ha sido ésta, ha corrido siempre a mi lado", dijo sujetando el rosario en su mano.
"Desde joven tuve la fortuna de conocer a Dios y Dios me dio la fe. Cuando tienes fe, consigues soportar el dolor. Hay dolores a los que no sabes darles un nombre, no sabes definirlos ni justificarlos, pero cuando crees en Dios ya no te preguntas más porqué a ti y no a otro. Y éste es un gran objetivo logrado", explicó en una segunda entrevista con RaiTV.
Annalisa, casada y madre de un hijo, se hizo popular en Italia no solo como atleta sino como cantante.
Nació el 27 de diciembre de 1976 en Rho, Milán, de niña empezó a tomar clases de danza y a partir de los 15 años, comenzó a destacar en el canto. En 1996, a la edad de 20 años le diagnosticaron una retinitis pigmentaria con degeneración macular, lo que le hizo ir perdiendo progresivamente la vista hasta la ceguera total.
En 1998, Annalisa se proclamó vencedora del prestigioso Festival de la Canción de San Remo. "Jesús, es la persona que siempre ha estado a mi lado. Yo lo he sentido a durante todos los mil 500 metros y durante todo el recorrido que me ha permitido vivir las Paralimpiadas", asegura.