MIAMI,
Cientos de exiliados cubanos y residentes de otras nacionalidades se reunieron ayer para rendir homenaje al fallecido líder del Movimiento Cristiano Liberación (MCL), Oswaldo Payá, en una Misa celebrada en la Ermita de la Virgen de la Caridad en Miami (Estados Unidos).
"Fue un católico en los momentos difíciles", afirmó el P. José Luis Menéndez al referirse a Payá Sardiñas. "Era un hombre directo, firme y sincero. Podían ustedes estar en desacuerdo pero nunca dejar de admirarlo", añadió durante su homilía delante de familiares y amigos del disidente.
El sacerdote de la iglesia del Corpus Christi afirmó que el líder del MCL "luchó por la justicia, la verdad y la paz. Sintió que buscar el reino de Dios lo comprometía con una lucha difícil. Pero era un hombre de parroquia, un hombre de oración y comunión".
En ese sentido, según informó El Nuevo Herald, el P. Menéndez dijo que Oswaldo Payá veía los derechos humanos "no como algo opcional que se puede dar a pequeñas dosis y por buena voluntad de los gobernantes", sino que "había que luchar por la justicia aunque fuéramos mal entendidos o no aceptados".
En su homilía, el sacerdote recordó el sufrimiento de Payá cuando el Gobierno comunista arrestó a decenas de miembros del MCL en abril de 2003 y que fue conocido como la Primavera Negra.
"Payá fue un líder indiscutible de la oposición. Fue una persona honesta y sincera que logró sacar muchas firmas y alentó a los cubanos a perder el miedo y salir a las calles", afirmó al referirse al Proyecto Varela impulsado por el MCL para lograr la transición pacífica de Cuba a la democracia. Este texto consiguió la adhesión de más de 25.000 ciudadanos a pesar de las persecuciones del régimen comunista.