ROMA,
La Conferencia Episcopal de Japón entregó una carta de protesta al gobierno luego que la policía ingresara, sin orden judicial, a una iglesia católica para arrestar a un ciudadano filipino por no contar con su pasaporte. El hecho, señalan, es una violación al derecho humano a la libertad religiosa.
Según señala el diario vaticano L’Osservatore Romano (LOR), la carta fue enviada el 2 de julio por los prelados al presidente de la comisión nacional de seguridad pública, Jin Matsubara. En ella los obispos rechazan que seis o siete policías ingresaran a una iglesia en el barrio de Kaizuka, en la diócesis de Yokohama, el pasado 27 de mayo en la Solemnidad de Pentecostés.
De acuerdo a UCAnews, los agentes de la estación de policía de Kawasaki-Rinko arrestaron al ciudadano filipino para investigarlo porque se habría excedido en su estadía legal en Japón. El arresto se dio sin previo aviso y sin orden de los juzgados.
El párroco de la iglesia, Padre Takashi Motoyanagi, señaló que al no tener una orden, los agentes no tenían derecho a ingresar a los terrenos de la parroquia. Los testigos del arresto afirman además que los policías se excedieron de manera verbal y en su accionar.
LOR señala que el Arzobispo de Osaka y Presidente de la Conferencia Episcopal, Mons. Leo Jun Ikenaga, fue en el encargado de entregar la carta en la que se solicita al ejecutivo "que no realice controles de identidad teniendo como blanco a los extranjeros ni a los presentes en las iglesias".
El Prelado solicita a la policía que "no perturbe la actividad de la Iglesia y se abstenga de entrar sin mandato en su propiedad". Solicita además que "no siga a los extranjeros a los lugares de culto que frecuentan ni procedan a controles de identidad en el interior de la propiedad de la Iglesia o en sus inmediaciones".