ROMA,
Del 15 al 18 de junio, el Secretario Emérito de Estado Vaticano, Cardenal Angelo Sodano, visitó Eslovenia para orar por las víctimas de la I Guerra Mundial, y abogó por que no se repitan los mismos errores.
A través de un comunicado de la Sala de Prensa del Vaticano, el Cardenal Sodano, indicó que recordar esta tragedia de la humanidad donde murieron nueve millones de personas "sirve para comprender mejor el deber común de de ser artífices de paz y de reconciliación entre los pueblos".
El Purpurado llegó acompañado por el Nuncio Apostólico en Liubliana, Mons. Juliusz Janusz, y el Embajador de Eslovenia ante la Santa Sede, Maja Marija Lovren?i?-Svetek.
Durante la visita, el Cardenal Sodano se entrevistó con los cardenales del país, el presidente del país, Danilo Türk, y el primer ministro Janez Janša, a quienes transmitió la bendición y el saludo del Papa Benedicto XVI.
Uno de los momentos más especiales de la visita fue la Misa del sábado en Tolmin, dedicada a todas las víctimas de guerra. Durante la homilía, la autoridad vaticana recordó la historia de su familia, en la que su padre, al terminar la guerra en 1919 fue enviado a esas tierras para proveer la sepultura de los caídos cuyos restos todavía yacían sobre los montes.
Al escuchar esta historia, el Cardenal Angelo prometió a su padre visitar aquellas tierras y gracias a este viaje pudo cumplir su promesa. El domingo en Nova Gorica, el Purpurado dedicó la Misa a la reconciliación entre los pueblos y la paz en el mundo. El Purpurado recordó las dos visitas del Beato Juan Pablo II al país, y explicó que la base de toda convivencia "deben ser la verdad, la justicia, la libertad y el amor".