La Arquidiócesis de Antequera Oaxaca (México) reafirmó su compromiso con la legalidad ante las persistentes acusaciones contra un sacerdote por supuestos abusos sexuales.
La prensa mexicana denunció el pasado 4 de junio que al menos 45 niños indígenas habrían sufrido abuso sexual a manos del Padre Gerardo Silvestre Hernández, desde 2009.
En un comunicado emitido el 6 de junio de 2012, la Arquidiócesis de Oaxaca pidió un proceso limpio, honesto y transparente, que permitirá "el esclarecimiento del caso y en la justicia para quien haya sido agraviado".
"Quien tenga que resarcir daños y perjuicios deberá asumir su propia deuda".
El mensaje criticó "que se opte por la vía de la denuncia mediática un asunto que debe ser tratado como el caso lo amerita: en estricta verdad y justicia".
"Es el Ministerio Público el encargado de investigar y perseguir los delitos. A él solicitamos su escrupuloso apego al Estado de Derecho".