VATICANO,
El Papa Benedicto XVI dispuso conceder la indulgencia plenaria a los católicos en cualquier lugar del mundo que recen en familia y cumplan algunos requisitos adicionales, con motivo del Encuentro Mundial de las Familias que se realizará del 30 de mayo al 3 de junio en Milán (Italia).
Como suele suceder en estas grandes celebraciones, el Santo Padre concede la indulgencia a los participantes del evento. La novedad esta vez está en que este don puede ser ahora obtenido desde cualquier parte del planeta.
La indulgencia plenaria puede ser obtenida por quienes, sin estar en Milán, se unan espiritualmente a los fieles en esa ciudad italiana y recen, en familia, las oraciones del Padre Nuestro y el Credo, además de "otras devotas oraciones", especialmente cuando se transmitan por radio o televisión las palabras del Papa en el evento.
Esto debe ir acompañado de las habituales condiciones generales: confesión sacramental, la comunión eucarística y la oración por las intenciones del Papa.
Así lo señala el decreto publicado hoy en latín e italiano por el Penitenciario Mayor de la Santa Iglesia Romana, Cardenal Manuel Monteiro de Castro.
El decreto indica que "se concede indulgencia plenaria bajo las habituales condiciones (confesión sacramental, comunión eucarística y oración según las intenciones del Santo Padre) a los fieles que, con el ánimo de separarse de cualquier pecado, participen devotamente en alguna función durante el mencionado Encuentro Mundial de las Familias, así como en su solemne conclusión".