MADRID,
El Atlético de Madrid ofreció el jueves el título de la Europa League, conquistado en Bucarest al derrotar en la final al Athletic de Bilbao por 3-0, a la Virgen de la Almudena, Patrona de la capital de España, en el que fue el inicio de los festejos por la conquista del trofeo continental el segundo en los últimos tres años.
El conjunto rojiblanco aterrizó en Madrid pasado el mediodía y se desplazó a un restaurante para realizar una comida de celebración, para posteriormente plantilla, cuerpo técnico y directiva, con la ausencia del consejero delegado Miguel Ángel Gil Marín, salir desde el Vicente Calderón a bordo de un autobús descubierto para comenzar su ruta por las calles de la ciudad.
Así, recibiendo ya el calor de los aficionados desde el instante de su llegada a la ciudad, los protagonistas se dirigieron a la Catedral de la Almudena, para proceder al tradicional ofrecimiento a la Patrona de Madrid del trofeo.
"Venimos a la iglesia de Madrid a dar gracias a Dios por este gran título y ofrendar la copa a la patrona, también patrona del Atlético. Le pedimos que siga intercediendo por nuestra gran familia rojiblanca, por lo que estaremos muy agradecidos", señaló Cerezo en su breve discurso.
Por su parte, el Obispo Auxiliar de Madrid, Mons. César Franco, anfitrión en la Basílica ante la ausencia de Monseñor Antonio María Rouco Varela, con una audiencia en Roma, felicitó al conjunto madrileño por un título que "hace que todos los madrileños se sientan especialmente orgullosos".
"Os agradecemos que hayáis tenido este detalle de traer esta Copa a los pies de la Virgen Patrona, que desde tiempo inmemorial sigue protegiendo a todos los madrileños. Os damos muy sinceramente la enhorabuena y queremos recalcar los valores del deporte".