VALENCIA,
El Prefecto para la Congregación del Culto Divino y la Disciplina de los Sacramentos, Cardenal Antonio Cañizares, ha señalado en su homilía de la Missa d'Infants que "no puede haber mayor esperanza que la Virgen de los Desamparados".
A la Madre de Dios ha invocado "especialmente en los instantes difíciles de nuestra vida, en las dificultades grandes del momento que vivimos, en las actuales circunstancias de nuestra tierra de Valencia, siempre abierta a ofrendar nuevas glorias a España, y de la misma España en una hora crítica de su historia".
El Cardenal Cañizares ha presidido la solemne Misa invitado por el arzobispo de Valencia, Monseñor Carlos Osoro, en la Plaza de la Virgen, llena de miles de personas.
El Purpurado ha advertido en su homilía de que "lo que está en la base de todas las tremendas crisis que atravesamos, incluida, en primer lugar, la económica, el verdadero problema de nuestra humanidad, lo que le hace perder vigor y novedad de vida y aferrarse a lo viejo y caduco, es la quiebra de humanidad, la falta de una visión verdadera del hombre, inseparable de Dios" .
Entre las autoridades participantes se encontraban miembros del Consell, encabezados por el presidente de la Generalitat, Alberto Fabra; el ministro de Asuntos Exteriores y de Cooperación, José Manuel García-Margallo; el presidente de les Corts Valencianes, Juan Cotino; la delegada del Gobierno en la Comunitat Valenciana, Paula Sánchez de León; la alcaldesa de Valencia, Rita Barberá, y concejales de su equipo de gobierno, así como el portavoz de la oposición socialista, Joan Calabuig.
También han participado el teniente general del cuartel general terrestre de Alta Disponibilidad, Rafael Comas; el general jefe de la VI zona de la Guardia Civil, Fernando Santafé; el vicegran canciller de la Universidad Católica de Valencia San Vicente Mártir, José Tomás Raga, así como el rector, José Alfredo Peris, y la rectora de la Universidad CEU Cardenal Herrera, Rosa Visiedo, entre otras personalidades.