El presidente de Estados Unidos, Barack Obama, ha desatado la polémica en esa nación al afirmar en una reciente entrevista que "las parejas homosexuales deberían poder casarse", pese a que 30 de los 50 estados del país lo prohíben.
En entrevista con la cadena ABC, que será emitida en su totalidad mañana y de la que se ha adelantado un pequeño fragmento, Obama dijo que "he llegado a la conclusión de que es necesario que afirme que, para mí, las parejas del mismo sexo deberían poder casarse".
El mandatario dijo además que "los estadounidenses gays y lesbianas deben ser tratados con justicia e igualdad" y comentó que por muchos años pensó que la unión civil era suficiente al legalizar "elementos que todas las demás parejas dan por descontado", razón por la cual siempre mantuvo una posición expectante al respecto.
Obama respalda así a su vicepresidente, Joe Biden, que el domingo se pronunció a favor del mal llamado "matrimonio gay", tras lo cual la Casa Blanca precisó que se trataba de su opinión personal.
Según una reciente encuesta el matrimonio entre personas del mismo sexo en Estados Unidos contaría con el respaldo del 50 por ciento de la población, mientras que un 48 por ciento considera que el matrimonio está formado por la unión natural de un hombre y una mujer.
Además, 30 de los 50 estados del país prohíben el matrimonio entre personas del mismo sexo, siendo Carolina del Norte el último en sumarse a esta lista al haber aprobado ayer una ley que define el matrimonio como la unión entre un hombre y una mujer.