La situación de Chen Guangcheng, un activista ciego pro-vida que estuvo preso 4 años por haberse pronunciado en contra de la política abortista del hijo único en China, aún preocupa a la comunidad internacional.
Si bien ha recibido de funcionarios del gobierno garantías por su seguridad, recientes informes refieren que ha pedido salir del país para proteger también a su familia ante diversas amenazas, concretamente contra su esposa.
Chen quedó ciego cuando era joven luego de una grave enfermedad. Desde hace unos años es un defensor de los derechos humanos y ha hablado firmemente en contra de la política del hijo único en China, que a menudo se implementa a través del aborto forzado y la esterilización.
De acuerdo con funcionarios estadounidenses, Chen salió de la embajada de Estados Unidos en Pekín el 2 de mayo y ahora recibe tratamiento médico en un hospital local y se ha reunido con su familia.
Los funcionarios chinos han prometido que será tratado con humanidad y se le permitirá irse con su familia a un lugar seguro en el país, donde puedan cursar estudios superiores.
Sin embargo, Associated Press (AP) informó que habló con Chen desde su habitación en el hospital luego de su llegada. Chen dijo a la agencia que ahora teme por su propia seguridad y la de su familia, y que quiere salir del país.