SANTIAGO,
El Arzobispo de Santiago de Chile, Mons. Ricardo Ezzati, decidió dar término canónico a la asociación clerical "Unión Sacerdotal del Sagrado Corazón de Jesús", liderada durante muchos años por el sacerdote Fernando Karadima.
La Congregación para la Doctrina de la Fe en el Vaticano halló en 2011 culpable de abusos contra menores al Padre Karadima, ordenándole se retire a una vida de penitencia y oración. En el decreto donde anunció su fallo, el dicasterio sugirió la realización de una visita apostólica (investigación) a la Unión Sacerdotal.
La visita apostólica fue llevada a cabo por Mons. Carlos María Collazzi, Obispo de Mercedes (Uruguay) entre el 4 y el 8 de diciembre de 2011, y posteriormente del 25 al 27 de enero de 2012, cuyas conclusiones ya están en poder de la Congregación para la Doctrina de la Fe.
En agosto de 2010, diez sacerdotes de la Unión Sacerdotal decidieron dejar esta institución al considerar verosímiles (antes del fallo del Vaticano) las acusaciones contra Karadima. La visita apostólica se ordenó para "verificar la eclesialidad de los caminos formativos y la transparencia de la gestión económica" de la institución.
Sobre el cierre de la Unión Sacerdotal, el Arzobispado de Santiago publicó un comunicado en el que se precisa que la decisión del Arzobispo Ricardo Ezzati "se tomó independientemente de la visita apostólica".
El texto indica que luego de escuchar al Consejo Directivo de la Unión Sacerdotal y la petición de sus miembros, el Arzobispo decidió cancelar el reconocimiento canónico que se le había otorgado con decreto arzobispal del 21 de Agosto de 1928, renovado el 23 de diciembre de 1989.