VATICANO,
El Papa Benedicto XVI señaló que la Iglesia Católica, liderada por el Sucesor de San Pedro, el Papa, es el lugar en donde Dios se encuentra con el mundo para abrirlo a la fe y el amor que necesitan las personas para ser plenamente felices.
Con ocasión de la Fiesta de la Cátedra de San Pedro, que se celebra el 22 de febrero pero que fue adelantada para este domingo, y un día después de haber creado 22 nuevos cardenales, el Santo Padre indicó que "la Iglesia es verdaderamente ella misma en la medida en que deja trasparentar al Otro, con la ‘O’ mayúscula, del cual proviene y al cual conduce".
"La Iglesia es el lugar donde Dios ‘llega’ a nosotros, y desde donde nosotros ‘partimos’ hacia él; ella tiene la misión de abrir más allá de sí mismo ese mundo que tiende a creerse un todo cerrado y llevarle la luz que viene de lo alto, sin la cual sería inhabitable".
En la homilía de la Misa que celebró en la Basílica de San Pedro junto a los nuevos cardenales, el Papa explicó que la verdadera fe está orientada al amor, pues "una fe egoísta no es una fe verdadera. Quien cree en Jesucristo y entra en el dinamismo del amor que tiene su fuente en la Eucaristía, descubre la verdadera alegría y, a su vez, es capaz de vivir según la lógica de este don".
"Todo en la Iglesia se apoya sobre la fe: los sacramentos, la liturgia, la evangelización, la caridad. También el derecho, también la autoridad en la Iglesia se apoya sobre la fe".
Benedicto XVI precisó que "la Iglesia no se da a sí misma las reglas, el propio orden, sino que lo recibe de la Palabra de Dios, que escucha en la fe y trata de comprender y vivir".