LOS ÁNGELES,
El Arzobispo de Los Ángeles (Estados Unidos), Mons. José Gómez, invitó a los fieles a practicar el ayuno, la limosna y la oración, porque con estas disciplinas de Cuaresma "aprendemos a vivir las verdades que Jesús nos enseñó".
"A través del ayuno, la limosna y la oración, encontramos un camino para romper todas las prisiones que hacemos para nosotros mismos. Por su gracia, aprendemos a negarnos a nosotros mismos y nuestras necesidades. Y encontramos que podemos abrir nuestros corazones a Dios y abrir nuestras manos para dar a nuestros prójimos en necesidad", afirmó en un artículo publicado en Vida Nueva el 16 de febrero.
Mons. Gómez dijo que la Cuaresma recuerda que el hombre necesita crecer en virtud y santidad para adquirir la fortaleza que le ayudará a lo largo del camino de nuestra peregrinación.
Así como Cristo después de su bautismo, añadió, los seres humanos "somos enviados al desierto de nuestro mundo". Sin embargo, "el hermoso mensaje de Cuaresma es que nosotros nunca estamos solos en el desierto de nuestra jornada de fe. Todo lo que enfrentamos en nuestra vida, Jesús lo ha enfrentado antes que nosotros".
"Al hacer nuestro camino de peregrinos a través del desierto de este mundo, Jesús está con nosotros siempre en su Iglesia. Él nos da nuestro pan diario, en la Palabra que viene de la boca de Dios; en el Pan de los Ángeles que recibimos en la Sagrada Eucaristía. Él nos perdona nuestros pecados en el sacramento de la Reconciliación", afirmó.
El Arzobispo de Los Ángeles invitó a los fieles a orar unos por otros y a pedir a la Virgen "que haga de esta temporada para todos nosotros, un hermoso tiempo de penitencia, purificación y conversión, mientras buscamos imitar a su Hijo".