MADRID,
El vicesecretario para asuntos económicos de la Conferencia Episcopal Española (CEE), Fernando Giménez Barriocanal, ha afirmado que los colegios concertados de la Iglesia Católica ahorran a las administraciones públicas más de 3.500 millones de euros, ya que, según ha explicado, hay 1,3 millones de alumnos en colegios concertados de titularidad de la Iglesia Católica.
En declaraciones a la Cadena Cope recogidas por Europa Press, Barriocanal ha explicado que, aunque es "complicado" valorar el ahorro que la Iglesia supone al Estado, también hay que sumar "decenas de miles de millones" de los hospitales de la Iglesia, la atención a inmigrantes, a víctimas de violencia de género, de los comedores sociales o de la ayuda para la reinserción de exdrogodependientes.
Sobre las encuestas que dicen que la posición de la Iglesia está debilitada, Barriocanal ha subrayado que "la mayor encuesta" sobre la opinión que se tiene de la Iglesia es la declaración de 9,2 millones de contribuyentes españoles que deciden asignar un 0,7 por ciento de sus impuestos a la Iglesia católica. A su juicio, el crecimiento de esta cifra es "un paso muy importante".
Según anunció este miércoles el portavoz y secretario general de la CEE, Mons. Juan Antonio Martínez Camino, un total de 7.454.823 millones de contribuyentes asignaron el IRPF a favor de la Iglesia en 2011 (correspondiente al ejercicio de 2010), un 0,96 por ciento más (casi 200.000) que en el ejercicio anterior, aunque la asignación total cae hasta los 248,3 millones de euros, frente a los 249,4 del ejercicio anterior, es decir, algo más de un millón de euros menos (1.162.820).
Además, indicó que, si se tiene en cuenta que el 23,8 por ciento de las declaraciones que se presentaron fueron conjuntas, se puede estimar que en la pasada primavera más de 9,2 millones de contribuyentes asignaron a favor de la Iglesia Católica.
Barriocanal ha explicado que la CEE destina la parte fundamental de esta cantidad que recibe al mantenimiento de la red de 22.700 parroquias, para la labor evangelizadora, y una serie de partidas a las conferencias episcopales del tercer mundo, a la Santa Sede, o a Cáritas, partida, esta última, que han incrementado en un 25 por ciento debido a la crisis.