La disposición sobre la obligación de incluir la anticoncepción en los planes de seguros en Estados Unidos es como "una bofetada en la cara" que dice "¡váyanse al diablo!" (to hell with you!) a los católicos y a la libertad religiosa, afirma el Obispo de Pittsburgh, Mons. David Zubik.
Así lo indicó el Prelado en referencia a la decisión de la administración del presidente Barack Obama, el pasado 20 de enero, de incluir en los seguros de los empleados, de manera obligatoria, la esterilización, la anticoncepción y los fármacos abortivos a partir de agosto de 2013.
"Este es el ataque del gobierno, por decreto, contra los derechos de todos: no solo de los católicos, no solo a la gente de todas las religiones. En ningún otro momento de la historia ha habido tal intrusión gubernamental en la libertad, no solo religiosa, sino que ha cruzado todo límite para con los ciudadanos", escribe el Prelado en la edición del 27 de enero del Pittsburgh Catholic.
"Kathleen Sebelius (Secretaria del Departamento de Salud y Servicios Humanos) y a través de ella, la administración Obama, le han dicho ‘¡váyanse al Diablo!’ a los fieles católicos de los Estados Unidos", denunció el Obispo y precisó que el gobierno ha violentado la libertad religiosa y la de consciencia.
El Prelado dijo además que la orden de la Secretaría de Salud trata al embarazo como si fuera una enfermedad y "obliga a todo empleador a subsidiar una ideología o pagar una penalidad mientras busca alternativas para la cobertura de salud". También ataca la reforma de salud al "ligarla de modo inextricable al celo de los burócratas pro-aborto".
Esta orden le dice a los católicos "no solo que violen sus creencias, sino que paguen directamente por esa violación" así como que "subsidien la imposición de una cultura anticonceptiva y de aborto para toda persona en Estados Unidos".