Nuevo libro explica aportes de San Juan de Ávila, futuro doctor de la Iglesia

El Prelado manifestó que el Santo tiene numerosas aportaciones que ofrecer a los hombres del siglo XXI gracias a la sencillez de su teología sapiencial, "que es una teología para la pastoral, para la evangelización, y lo que lo hace tremendamente actual".

"En este sentido, San Juan de Ávila, se siente en el seno del misterio del amor de Dios a los hombres, que es la Iglesia. La Iglesia es el cuerpo de Cristo, del Dios humanado, del Dios encarnado. La Iglesia tiene el elemento visible de los sacramentos y de la palabra, pero es una realidad ante todo de un misterio del amor de Dios hacia los hombres. Por lo tanto, tiene un nuevo ardor, tiene una ilusión por trasmitir todo aquellos que es gracia".

Según Mons. del Río, la teología avilense se aproxima a la de Ratzinger, "porque en el Maestro de Ávila, encontramos la elocuencia de una gran profesor y la cercanía de un pastor, es por eso entusiasmaba a las masas como predicador de Andalucía, y es por eso también que era capaz de escribirle a las personas de altura intelectual o bien, personas que se ocupaban de la vida pública".

"No hay una parcela del pueblo de Dios que no la haya tocado el maestro de Ávila. Por eso no es un santo clerical , sino que es un santo universal, porque habló a sacerdotes, pero habló también a la vida consagrada, y habló también a los padres de familia, y habló también a los pobres y los necesitados, y a todos, les anunciaba el único misterio que da sentido a nuestra vida: Que Dios nos quiere y Dios nos ama porque nos ha redimido en el misterio de Jesucristo, la Iglesia nace en la cuna de Belén, y se consagra en los desposorios de Jesucristo en la cruz".

Finalmente, en declaraciones a ACI Prensa, la postuladora enumeró los requisitos que se deben reunir para que un Santo sea nombrado Doctor de la Iglesia: eminencia, es decir, salirse de lo común; saber vivir la fe, no solo conocerla sino vivirla; y saber comunicar, "San Juan de Ávila era un gran comunicador".

"Entonces, es a partir de los trabajos que se han hecho, lo que ha conducido a que en este momento presente el Papa considere que reúne los requisitos para ser nombrado Doctor de la Iglesia", concluyó.