MADRID,
El Arzobispo de Madrid, Cardenal Antonio María Rouco Varela, destacó que la Virgen Inmaculada, cuya festividad se ha celebrado este miércoles en la vigilia de la Catedral de La Almudena, advierte "en estos momentos críticos de tanto sufrimiento e incertidumbre de la grave necesidad de recuperar la conciencia del pecado".
"Resulta una pura ilusión, cuando no un alarde de vana soberbia, pretender que entre la actual crisis económica y social y la negación persistente y despectiva de sus raíces morales y religiosas no haya ninguna relación de causa y efecto", argumentó el Cardenal Rouco Varela en su homilía.
El Cardenal recordó que en María Inmaculada "queda vencido el pecado en su origen" desde el principio de su existencia, lo que obliga al cristiano a tener presente que "vencer el pecado es la condición primera e inexcusable para acertar en el camino de la vida".
"No habría peor engaño", continuó, "que el de afirmar que no se necesita ningún proceso de reforma ética y espiritual de la conciencia personal y de la opinión pública".
En este sentido, puso como ejemplo las confesiones de miles de jóvenes participantes en la Jornada Mundial de la Juventud (JMJ) celebrada en Madrid por reconocer públicamente su condición de pecadores, "el origen de sus más graves e íntimos problemas".
En la necesidad de "dejarse encontrar con Cristo", el Purpurado señaló que los jóvenes de la JMJ "acertaron" al mostrar con sus confesiones que la solución es "el perdón, la misericordia y el amor a Jesucristo". "La Fiesta del Perdón en el Retiro", dijo, "fue una de sus expresiones más hermosas".