LOS ÁNGELES,
El Arzobispo de Los Ángeles (Estados Unidos), Mons. José Gómez, afirmó que ser "Guadalupanos" significa cuidar y enorgullecerse de las raíces cristianas, fortaleciéndolas a través de la oración y la devoción a la Virgen de Guadalupe y testimoniando a Cristo en la vida diaria.
El Prelado dijo estas palabras durante la Misa en honor a Nuestra Señora de Guadalupe celebrada en el East Los Ángeles College Stadium el 4 de diciembre. En su homilía recordó sus orígenes hispanos y la devoción a la Virgen del Tepeyac que desde pequeño le inculcaron sus padres.
"De pequeño, cuando crecía en Monterrey, mis padres nos enseñaron a mis hermanas y a mí, a tenerle una sencilla devoción. Ellos nos enseñaron que María es nuestra madre querida Santa María de Guadalupe, quien siempre nos cuida", señaló.
También recordó que su padre "cada año iba con sus compañeros de trabajo de peregrinación al santuario de Guadalupe en Monterrey. Nuestra tradición de ir en procesión, peregrinación cada año a los Santuarios de la Virgen María para demostrarle nuestro amor a la Santísima Virgen. Estas son mis raíces, hermanos y hermanas. Sé que son sus raíces también".
Por ello alentó a los fieles a alimentar "y crecer desde nuestras raíces, a través de la gracia que recibimos en los sacramentos de la Iglesia. Necesitamos prometer que siempre trataremos de dar buenos frutos para Jesús en nuestras vidas".
"Demos gracias a Dios por el don de nuestras raíces, por el don de nuestras familias y el don de nuestra herencia y tradición hispanas. Agradezcámosle por el hermoso tesoro de nuestra fe católica, por el gozo de conocer el amor de Jesucristo y las misericordias de nuestra Madre del Tepeyac", expresó.