ROMA,
El Papa Benedicto XVI expresó su pesar por el asesinato de una religiosa croata y un misionero italiano ocurrido el pasado domingo 27 de noviembre en la localidad de Ngozi en Burundi (África).
En un mensaje enviado al Obispo de Ngozi y firmado por el Secretario de Estado Vaticano, Cardenal Tarcisio Bertone, el Santo Padre expresa su cercanía y solidaridad tras el asesinato de la religiosa croata Lukrecija Mamic, de las Siervas de la Caridad, y el misionero italiano Francesco Bazzani de la asociación Ascom de Legnano.
El Santo Padre elevó sus oraciones por los fallecidos y por cuantos "han sido golpeados por estas muertes brutales" perpetradas por dos hombres armados que además dejaron a otra religiosa herida.
Según informa la agencia vaticana Fides, el Papa "adolorido" expresa "sus sinceras condolencias y pide a Dios, Padre de toda misericordia, que acoja en su Reino a estos difuntos que han consagrado sus vidas al servicio de los enfermos y los pobres".
Benedicto XVI invoca también "coraje y esperanza" para la hermana Carla Lucia Brienza, la religiosa que fue herida, "para que supere esta prueba".
En entrevista concedida a la agencia MISNA, el sacerdote Michele Tognazzi, misionero fidei donum explicó que los criminales asesinaron a la religiosa Lukrecija Mamic en el asalto a su casa. Sor Carla y Francesco fueron secuestrados y posteriormente atacados.