LIMA,
El Arzobispo de Lima y Primado del Perú, Cardenal Juan Luis Cipriani, llamó al Gobierno y a los sectores involucrados en las últimas protestas en la ciudad andina de Andahuaylas (Apurímac), a resolver los conflictos sociales dialogando con la verdad y dejando de lado la ideología de la violencia y el odio.
En el programa radial Diálogo de FE, el Purpurado se refirió a las protestas que pobladores de Andahuaylas realizan contra la minería en esta zona del país y que en los últimos días terminó en enfrentamientos con la policía.
"En esas mesas de diálogo tiene que haber verdad. No puede haber ningún tipo de violencia. Poner orden, eso sí es obligación del Estado. Hay un derecho del Estado a defender que haya orden público y respeto a la propiedad, eso no puede ser un dato discutible, pero sí tiene que haber verdad", señaló el sábado el Arzobispo de Lima.
El Cardenal señaló que "cuando no hay verdad el castigo tiene que ser fuerte, porque quien tiene obligación de gobierno, empresarial o sindical y miente para generar violencia está cometiendo un delito muy grave. Veracidad, diálogo y no violencia, esto hay que articularlo, pero son elementos previos a las discusiones, elementos que están en el corazón de lo que la Iglesia nos enseña en su doctrina social".
El Purpurado recordó que todos los peruanos forman una familia, por ello pidió dejar de lado "la media verdad, la mentira, y seamos más transparentes".
"Tal vez, el que quiere hacer una explotación (minera) tiene que ser más comprensivo con el entorno ambiental; y tal vez el que vive en el ambiente tiene que darse cuenta que eso va a generar empresa, dinero, trabajo y progreso. Hay que desterrar la ideología de la violencia y del odio, y también la ideología del egoísmo y de esa estructura individualista", indicó.