VATICANO,
El Pontificio Consejo para la Pastoral de los Migrantes e Itinerantes presentó este martes el mensaje escrito por el Papa Benedicto XVI para la Jornada Mundial del Migrante y el Refugiado 2012, en el que pide acoger al extranjero, rechazar el racismo, y la involucración de los laicos en la transmisión del Evangelio.
El mensaje se titula "Migraciones y nueva evangelización" y fue presentado por el Presidente del Pontificio Consejo, Mons. Antonio Maria Vegliò; el Secretario, Mons. Joseph Kalathiparambil; y el Subsecretario, P. Gabriele Ferdinando Bentoglio.
Mons. Vegliò indicó que en el mensaje, el Papa afirma que la nueva evangelización se dirige a los trabajadores migrantes, los refugiados y los estudiantes internacionales; en un contexto social en el que "la mezcla de nacionalidades y religiones crece de manera exponencial".
"Ante este desafío, la Iglesia necesita revisar sus métodos, sus expresiones y su lenguaje, renovando su impulso misionero. Una ‘nueva’ evangelización que no modifica los contenidos y los valores del mandato misionero transmitidos por la Sagrada Escritura, la Tradición y el Magisterio", afirmó.
El Prelado indicó que las migraciones ofrecen la oportunidad de evangelizar a las personas que llegan de otras regiones y no han encontrado aún a Cristo. También pidió no olvidar a los numerosos cristianos que migran a países donde son minoría. Dijo que en todos estos casos se debe "implicar necesariamente al laicado y apoyarse en el diálogo a todos los niveles".
Por su parte, Mons. Kalathiparambil señaló que según las últimas estadísticas del ACNUR, cuatro de cada cinco refugiados son acogidos por países en vías de desarrollo. A la vez, en muchos países del primer mundo crece la hostilidad hacia estas personas.