Un ex musulmán que se convirtió en pastor evangélico fue sentenciado a muerte en Irán el 25 de septiembre pasado. Se tema que Yousef Nadarkhani haya sido ejecutado esta semana pero se desconoce su suerte.
Yousef, de 34 años de edad, fue detenido en el año 2009 tras protestar porque a sus dos hijos se les obligaba a estudiar el Islam en el colegio, pese a que la Constitución de Irán reconoce la libertad religiosa. El cargo de su condena a muerte es el de apostasía por haber dejado de ser musulmán. Yousef dejó el Islam cuando tenía 19 años y se convirtió al cristianismo.
Inicialmente el American Center for Law and Justice alertó que la ejecución podría realizarse el miércoles 28 de septiembre pero hasta el momento no se sabe si es que esta se ha producido o no.
Las autoridades iraníes, concretamente la Audiencia Provincial de la región de Gilan, al noroeste del país, establecieron que Yousef, por tener ascendencia islámica no tiene derecho a ser cristiano y por lo tanto debe renegar de Cristo.
La sentencia ha sido ratificada por la Corte Suprema de Irán.
Diversos países como el Reino Unido y Estados Unidos han solicitado a Irán no cumplir la sentencia de muerte, ya que constituye "un desprecio total" hacia la libertad religiosa que es un derecho humano fundamental.