CARACAS,
Durante la Misa de inauguración del año académico en el Seminario Santa Rosa de Lima, el Cardenal Jorge Urosa Savino, Arzobispo de Caracas, recordó a los seminaristas la importancia de responder con fidelidad y entrega a su vocación sacerdotal.
El Cardenal Urosa explicó que durante la formación en el Seminario es necesario que "los favorecidos con el bellísimo y sublime don de la vocación, profundicen en la opción fundamental por Cristo, para que como nos lo indica San Pablo, vivan en el Espíritu y así puedan hacerlo presente en el mundo a través de su ministerio y vida sacerdotal".
Luego de referirse a la importancia de crecer en el amor a Dios, el Purpurado señaló que "ser sacerdote, mis queridos hermanos es estar identificado con Cristo, tener sus sentimientos, su ardor apostólico, su inmenso amor, sus virtudes, vivir intensamente la liturgia y la Eucaristía. Porque el Sacerdote debe ser, ante todo y en cada momento, testigo, representante, embajador de Jesucristo".
Al referirse a la importancia de la formación el Arzobispo de Caracas señaló que "el trabajo académico, que es importantísimo, y debe ser desarrollado por todos, profesores y alumnos con gran dedicación, debe estar lleno de Dios, y realizarse según el Espíritu, invocándolo para conocer cada vez más al Señor, y para poder presentarlo y anunciarlo con claridad y fuerza en un mundo cada vez más complejo y desorientado".
Finalmente el Purpurado invitó a los seminaristas a comenzar este año con una actitud de búsqueda de Dios "con el deseo de crecer en su amor, de conocerlo y amarlo cada vez más, de profundizar en la experiencia de su presencia viva en nuestros corazones, en el trabajo diario por asimilarnos cada vez más a Nuestro Señor Jesucristo, es decir, crecer en todas las virtudes".
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