SAN SALVADOR,
El Arzobispo de San Salvador (El Salvador), Mons. José Luis Escobar Alas, manifestó el deseo de la Iglesia Católica por conocer la verdad en el caso del asesinato de Mons. Oscar Arnulfo Romero, ocurrido el 24 de marzo de 1980.
Ante la reciente publicación del nombre del francotirador que acabó con la vida de Mons. Óscar Arnulfo Romero, el Arzobispo de San Salvador no descartó la opción de pedir la reapertura del proceso judicial y se reinicien las investigaciones para esclarecer su asesinato.
Mons. Escobar señaló que se están estudiando con detenimiento todos los factores implicados en el asesinato y las posteriores diligencias, investigativas y jurídicas.
El Arzobispo afirma que "Tutela Legal y la Iglesia estamos viendo esa situación, pero no hemos tomado esa decisión, siendo algo tan importante no nos apresuraremos, pero queremos que se esclarezca el crimen y no continúe en la impunidad".
El 9 de septiembre Diario Co Latino reveló que Marino Samayoa Acosta, subsargento de la extinta Guardia Nacional, habría sido quien disparó contra Mons. Romero en 1980
Samayoa Acosta fue seguridad personal del ex presidente de la República, Arturo Armando Molina, y fue el hijo de éste, Mario Molina, quien le habría acabar con la vida del obispo.