SANTIAGO,
Al presidir la Misa con ocasión de la celebración de la Virgen del Carmen de Maipú, el Nuncio Apostólico en Chile, Mons.Ivo Scapolo, pidió a toda la población contribuir para lograr una "convivencia social pacífica", respetando a las instituciones, en el camino para favorecer la justicia y la paz.
Ante de la Misa se leyó una carta de Mons. Ricardo Ezzati, Arzobispo de Santiago de Chile, quien dio la bienvenida al Nuncio Apostólico. Además el Alcalde de Santiago, Pablo Zalaquett, entregó al Mons. Scopolo el libro "Santiago de Chile, catorce mil años", editado por el Museo de Arte Pecolombino.
En su discurso el Alcalde agradeció la guía espiritual y social de la Iglesia Católica en nuestro país y la mediación del Vaticano en el diferendo limítrofe con Argentina. "En el día de Procesión de la Virgen del Carmen, nombrada Patrona de Chile por Pío XI en 1926, deseamos de todo corazón, que tenga mucho éxito", sostuvo.
Por su parte, Mons. Scapolo, antes de dar inicio formal a la procesión, pidió que por intercesión de la Virgen del Carmen, Chile pueda "crecer en caridad, justicia, paz y libertad para que siempre se busque en ella el bien común, se respete la dignidad de todos y se construya una sociedad que sea reflejo de la aspiración de la Patria Eterna".
En su homilía y al referirse a la presencia de la Virgen María, el Prelado recordó que "Ella se preocupa que nunca falte el pan, el trabajo y la alegría y vela especialmente en los momentos de dolor, como lo hizo junto a la cruz de Jesús y lo sigue haciendo con todos los crucificados de la historia".
Más adelante el Nuncio explicó que María ejemplo para todo católico de cómo meditar y contemplar lo que el Señor dice mediante su Palabra. Sobre la actitud de la Virgen en el Magnificat, Mons.Scopolo destacó que "también nosotros tenemos que estar vigilantes y disponibles a ir en ayuda de aquellos que tienen necesidad de orden material o espiritual".