BRASILIA,
El Nuncio Apostólico en Brasil, Mons. Lorenzo Baldisseri, expresó su alegría por la llegada de la Cruz de la Jornada Mundial de la Juventud (JMJ) al país el domingo pasado, y afirmó que el Papa Benedicto XVI quiere que los jóvenes brasileños la abracen y lleven a Chile, Argentina, Uruguay y Paraguay, las naciones del Cono Sur de Sudamérica.
"El Papa está encomendando a ustedes, jóvenes, esta importante misión de ser protagonistas de la aventura que es llevar la Cruz y el Ícono de Nuestra Señora a todo el Brasil y el Cono Sur. Por tanto, abracen el deseo de la Cruz y desarrollen la alegría de vivir y alcanzar la felicidad", afirmó.
El Prelado recordó que la Cruz representa a Cristo y que solo el Señor "puede darnos un nuevo ánimo a la fidelidad en la misión porque es Él quien nos impulsa a dar testimonio de la fe"".
Por su parte, el Presidente de la Conferencia Nacional de Obispos de Brasil (CNBB), Cardenal Raymundo Damasceno, agradeció a Benedicto XVI por elegir a esta nación sudamericana como sede de la JMJ 2013. Dijo que la Cruz y el Ícono de la Jornada son muy representativos para los jóvenes.
Indicó que "hasta el 2013 viviremos un tiempo favorable de evangelización, momento de involucrar a los jóvenes en la vida de la Iglesia, de transmitir el patrimonio de la fe a las nuevas generaciones".
"Que la juventud eterna de María nos aliente a preservar en el seguimiento de Jesucristo. Ustedes, jóvenes, son la esperanza del Brasil, los centinelas del mañana", añadió.