VATICANO,
Al recibir esta mañana al sexto grupo de Obispos de la India en visita ad limina, el Papa Benedicto XVI señaló que los cristianos deben ser promotores de la justicia y la paz en esta nación, así como amantes de la verdad sobre Dios y el ser humano.
En su discurso en el Palacio Apostólico de Castel Gandolfo, el Papa recordó que "la India cuenta –como parte de su rica y antigua herencia– con una amplia y notable presencia cristiana que ha contribuido a la sociedad y beneficiado la cultura de innumerables maneras, enriqueciendo así en ese país las vidas de un sinfín de ciudadanos y no solamente de los católicos".
"La Iglesia en la India, por encima de todo, proclama su fe y amor a la sociedad en general, y pone esta afirmación en práctica a través del interés por todos los aspectos de la vida espiritual o material de los demás", prosiguió.
En particular, dijo luego el Papa, "la Iglesia Católica es amiga de los pobres. Al igual que Cristo, acoge sin excepción a todos los que se acercan a ella para escuchar el mensaje divino de paz, esperanza y salvación. Más aún, obedeciendo al Señor, sigue haciéndolo sin distinción de ‘tribu, lengua pueblo y nación’, pues en Cristo, ‘somos un solo cuerpo’".
"Por tanto, es imperativo que el clero, los religiosos y catequistas de vuestras diócesis estén atentos a las diversas circunstancias lingüísticas, culturales y económicas de aquellos a quienes sirven".
Seguidamente Benedicto XVI advirtió que "hay que tener en cuenta los desafíos que la naturaleza misionera de la Iglesia conlleva. Debéis estar siempre preparados para extender el Reino de Dios y seguir las huellas de Cristo, que fue incomprendido, despreciado, falsamente acusado y que sufrió por amor a la verdad".