VATICANO,
La Oficina de Prensa de la Santa Sede informó que la Fraternidad Sacerdotal San Pío X –que agrupa a los seguidores del arzobispo Marcel Lefebvre que ordenó cuatro obispos sin permiso del Papa y falleció excomulgado– debe aceptar unas condiciones mínimas que aseguren su fidelidad al Magisterio para volver a la comunión de la Iglesia Católica.
En un comunicado oficial, la Santa Sede explica que el grupo ha recibido un documento llamado Preámbulo doctrinal con estas exigencias.
El P. Federico Lombardi, Director de la Sala de Prensa de la Santa Sede, explicó que de aceptar las condiciones expuestas en un Preámbulo doctrinal, el status jurídico que recibiría la Fraternidad podría ser el de Prelatura personal, una jurisdicción eclesial sin límites geográficos para iniciativas pastorales.
El comunicado sigue a un encuentro realizado hoy en el Vaticano y que duró unas dos horas, entre el Cardenal William Levada, Prefecto de la Congregación para la Doctrina de la Fe y Presidente de la Comisión Ecclesia Dei (creada para el diálogo con los lefebvristas), y el obispo Bernard Fellay, Superior General de la Fraternidad Sacerdotal San Pío X.
Este encuentro cierra las ocho sesiones de diálogo doctrinal entre los expertos del Vaticano y los representantes de la Fraternidad, sostenidos entre 2009 y 2011, a pedido del Papa luego del levantamiento de la excomunión de los cuatro obispos ordenados por Lefebvre.
En declaraciones a ACI Prensa, fuentes vaticanas explicaron que lo que se ha expuesto a la Fraternidad durante el encuentro de hoy ha sido "definitivamente un ofrecimiento muy generoso".