21 de noviembre de 2024 Donar
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Capellán militar ostenta insólita colección de solideos papales

P. Kevin Peek / Benedicto XVI

El periódico Colorado Catholic Herald difundió la curiosa historia del sacerdote Kevin Peek, un capellán militar que ostenta una colección de solideos papales obtenidos gracias a una poco conocida tradición eclesial.

"Hay una tradición muy antigua según la cual, si compras un solideo blanco en la sastrería del Papa y lo sostienes durante una audiencia papal, la Guardia Suiza se encargará de intercambiarlo por el que lleva el Papa en ese momento", relató el sacerdote.

El solideo es el gorro usado por el Papa y los obispos, el del Pontífice siempre es blanco.

La sastrería Gammarelli, establecida en 1798, ha servido a cinco Papas. Cuenta con una amplia variedad de prendas de vestir religiosas, entre ellas casullas y mitras, además del solideo papal que vale unos 50 dólares.

El Padre Peek, sacerdote de la Arquidiócesis de Atlanta y quien recientemente sirvió como capellán del ejército en Afganistán, pudo obtener en los últimos 16 años obtuvo tres solideos usados por tres Papas diferentes, los que conserva en una urna de cristal.

El primero lo obtuvo siendo aún seminarista en diciembre de 1996. Su promoción viajó a Roma y le concedieron una Misa con el Beato Juan Pablo II. Mientras sus compañeros paseaban por Roma, el Padre Peek compró un solideo en Gammarelli.

Durante la Misa en la capilla privada del Papa, estuvo sentado en la parte de atrás para ser uno de los últimos en salir de la capilla y terminar en la parte delantera de la línea de los seminaristas a la espera de reunirse con el Papa. Después que el Papa lo saludó y le dio un rosario, el Padre. Kevin sacó el solideo y se lo mostró al secretario del ahora Beato.

El secretario por unos momentos pensó que todos los seminaristas habían llevado un solideo, pero luego se dio cuenta de la tradición y se realizó el intercambio.

Al final de la audiencia, el secretario le pidió devolver el solideo y le entregó el que había comprado. Para el Padre Kevin es un tesoro tener un solideo que el Beato Juan Pablo II usó por unos 40 minutos.

Diez años más tarde, el Padre quiso repetir la hazaña con el Papa Benedicto XVI. Esta vez durante una audiencia general de los miércoles en el Vaticano. El sacerdote hizo todo lo posible para que la Guardia Suiza se diera cuenta de que llevaba un solideo nuevo, pero no le hicieron caso.

Viendo que estaba perdiendo su oportunidad, el sacerdote osó saltar las rejas que separan al público del área donde el Papa Benedicto XVI se reunía con un pequeño grupo y logró llamar la atención del Pontífice.

El mismo Papa Benedicto XVI, que "ama este tipo de tradiciones", se acercó al Padre Peek, tomó el solideo nuevo y le entregó el que había estado usando. La multitud que lo rodeaba se quedó atónita, y todos querían saber qué había pasado.

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El tercer solideo papal del Padre Peek llegó por una ruta diferente. Un anciano sacerdote de la arquidiócesis de Atlanta tenía un solideo usado por el Papa Pío XII y le preocupaba que, una vez muerto, nadie querría su valiosa posesión lo suficiente como para cuidar de ella. Cuando oyó la historia del Padre Peek, el anciano sacerdote se lo envió por correo.

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