BUENOS AIRES,
La Comisión Permanente de la Conferencia Episcopal Argentina (CEA), afirmó que “el aborto nunca es una solución” y que su despenalización “tendría consecuencias jurídicas, culturales y éticas” para el país.
“Las leyes van configurando la cultura de los pueblos y una legislación que no protege la vida favorece una cultura de la muerte. La ley, en cuanto base de un ordenamiento jurídico, tiene un sentido pedagógico para la vida de la sociedad”, advirtieron los obispos al referirse a dos proyectos a favor del aborto que serían discutidos en la Cámara de Diputados de la Nación el próximo mes.
Uno de estos proyectos quiere la despenalización absoluta del aborto hasta las doce semanas de gestación de manera “libre y gratuita”. El otro texto, elaborado por el diputado Juan Carlos Vega, busca “agilizar” los casos de aborto no punibles contemplados en el artículo 86 del Código Penal.
Ese artículo afirma que el aborto “no será punible” en caso de peligro para la vida o la salud de la madre y si el embarazo proviene de una violación contra una mujer idiota o demente.
Ante esto, los obispos publicaron ayer una declaración que recuerda que la vida es “un signo de la presencia de Dios” y que la ciencia ha demostrado “que desde el momento de la concepción existe una nueva vida humana que ha de ser tutelada jurídicamente”.
“Queremos afirmar con claridad: cuando una mujer está embarazada, no hablamos de una vida sino de dos, la de la madre y la de su hijo o hija en gestación. Ambas deben ser preservadas y respetadas”, expresaron.