KÖNIGSTEIN,
El Presidente de la Conferencia Episcopal de Pakistán, Mons. Joseph Coutts, alertó que la reorganización política del gobierno que erradicó el Ministerio para las Minorías y en su lugar creó el Ministerio para la Armonía Nacional, en la práctica degrada a los cristianos y otros grupos que sufren la persecución de extremistas musulmanes.
En declaraciones a la organización internacional católica Ayuda a la Iglesia Necesitada (AIN), el también Obispo de Faisalabad explicó que el nuevo ministerio, que estará bajo el liderazgo del católico Akram Masih Gill, tendrá un rango menor al del ex ministro de minorías, el también católico Shahbaz Bhatti, asesinado brutalmente por extremistas musulmanes en marzo.
"En mi opinión, esto es un retroceso, es una especia de degradación respecto a la representación de las minorías", señaló el Prelado.
Mons. Coutts se refirió también al nombramiento de Paul Bhatti, hermano del ministro asesinado, quien es ahora consejero del Primer Ministro pakistaní. "Es cierto que con el nombramiento del Sr. Gill y del Dr. Bhatti hay dos canales para que la voz de las minorías sea escuchadas, pero ninguna tendrá el mismo impacto que la de Shahbaz Bhatti que era un ministro federal".
Uno de los principales problemas que enfrentan no solo los cristianos sino también los hindúes y los sikhs, es el abuso que hacen los musulmanes de la llamada "Ley de Blasfemia", según la cual quien ofenda al Corán o a Mahoma puede enfrentar severas penas, incluso la muerte.
La crítica que hizo a esta norma el ministro Shahbaz Bhatti, fue la razón que dieron los extremistas islámicos para justificar su brutal asesinato. La misma suerte corrió el gobernador del estado de Punjab, Salman Taseer, quien expresó su oposición a la condena a muerte de una cristiana madre de cinco hijos, Asia Bibi, condenada a muerte bajo esta ley.