ROMA,
El regente de la Penitenciaría Apostólica, Mons. Gianfranco Girotti, afirmó que la Iglesia Católica jamás denunciará la confesión de un fiel, luego que autoridades civiles de Irlanda anunciaran un intento legal para encarcelar a sacerdotes que mantengan el secreto de confesión en casos de abuso sexual.
En declaraciones a Il Foglio, Mons. Girotti indicó que "Irlanda puede hacer los proyectos de ley que desee, pero debe saber que la Iglesia no se someterá jamás a la obligación de la denuncia del confesor a la autoridad civil".
El 14 de julio, el Primer Ministro irlandés, Enda Kenny, prometió introducir una nueva ley que llevaría a prisión a los sacerdotes hasta por cinco años si no denuncian ante las autoridades los crímenes de abuso sexual revelados durante las confesiones.
La propuesta de ley contradice el Derecho Canónico que defiende la inviolabilidad del secreto sacramental y prohíbe a los confesores traicionar en modo alguno.
Mons. Girotti explicó que "para el confesor que infringe el secreto de confesión está prevista la excomunión ‘latae sententiaè’ - automática- por parte de la Iglesia", y por ello es "absurda e inadmisible" la propuesta de ley.
"La confesión es una cuestión privada que permite al penitente enmendarse, purificarse. El secreto es una condición necesaria", pero esto "no significa que los obispos no deban vigilar a los pedófilos, y hechas las oportunas verificaciones, pedir a esta gente que paguen por sus propios crímenes", señaló.