BUENOS AIRES,
Con el lema "El aborto mata a un hijo y destruye a una mujer", una manifestación a favor de la vida desde la concepción se concentró ayer ante el Congreso de la Nación, donde la presidenta de la Comisión Interamericana de Derechos Humanos (CIDH), Luz Mejía, emplazó a Argentina en una audiencia pública, a aceptar la despenalización del aborto.
Según informa la agencia AICA, casi mil personas, en su mayoría jóvenes mujeres, se reunieron en la esquina de Rivadavia y Riobamba con carteles con leyendas como "Yo voto por la vida" y retratos de niños con la frase "No me abortes".
Otros cartelones decían "Quieren que tu hija de 14 años pueda abortar sin que lo sepas", "Que no te engañen", "Defendé tu especie" o "Antes de abortar, realizate una ecografía. Después decidí". Tres cartelones también mostraban a la modelo Natalia Fassi embarazada, protagonista de una campaña en defensa de la vida y contra el aborto.
No muy lejos de allí, en la calle Riobamba, un minúsculo grupo de feministas promotoras del aborto, que se denominan "Las Rojas" vitoreaban lemas a favor de esta práctica anti-vida.
Entre los asistentes a la manifestación pro-vida que también realizó una audiencia como la que se realizaba al interior del Congreso, participaron el pediatra Carlos Botta, quien se refirió al aborto provocado como la "pena de muerte del niño por nacer" y desestimó las cifras de supuestas estadísticas de muertes maternas por aborto.
Sostuvo además que no habría ninguna muerte materna por aborto si no hubiera aborto, y se remitió a datos de países como Irlanda, donde son casi inexistentes.